Viaje de vuelta
Después de meses de viaje por el mundo comienzo uno nuevo…el viaje de vuelta.
De vuelta a mi vida anterior, a la rutina de trabajo que aquí dejé…a “la vida real” -expresión que algunas personas de mi alrededor han utilizado y que siempre que la escucho me quedo pensativa…¿qué es real y qué es irreal?…lo que es una “vida real” o “normal” para nosotros/as puede que no lo sea para otras personas, para otras culturas (y me he encontrado con mucha gente en el mundo con “vidas reales” muy diferentes a las nuestras).
Aunque suene extraño, porque se supone que volvemos a lo conocido, a casa, “los viajes de vuelta” pueden ser tan intensos como lo vivido durante los meses de ausencia (lo sé por experiencias anteriores cuando decidí dejar países, después de meses y/o años allí, para “volver”). Y es que volvemos al “mismo sistema” (misma rutina, trabajo, ciudad, familia y grupo de amigos/as…) siendo personas nuevas, diferentes, al haber vivido experiencias que nos han marcado.
Es necesario pues un proceso de “re-adaptación”, de “re-ajuste” o incluso de construcción de un nuevo sistema. En definitiva, se trata de un verdadero viaje de vuelta hasta conseguir aterrizar.
Estos procesos llevan tiempo y como en todo (trabajo, relaciones, viajes…la vida en general), nuestra actitud va a ser una pieza clave para evitar adentrarnos en laberintos sin salida y llegar a buen puerto…y ¿por qué no?… para “disfrutar” del camino con sus altos y bajos. Pero también la comprensión y actitud de los demás elementos del sistema que nos vuelve a recibir es fundamental.
Después de meses y a veces años de ausencia (ya sea por un periodo sabático, por permiso de maternidad o paternidad, por enfermedad, por cuidado de una persona mayor, por excedencia para estudiar o trabajar en otra organización, por pérdida de un ser querido, etc.) donde nuestra “realidad” ha cambiado, contar con una organización que cuenta con un plan de conciliación de la vida laboral y personal ayuda mucho (recordemos que las organizaciones son sistemas humanos con situaciones personales y laborales cambiantes), pero creemos que la clave es el diálogo entre todas las partes del sistema, la flexibilidad, la empatía, el talante de buscar soluciones, el atrevernos a innovar y el Amor (con mayúscula) que es lo que nos une a las personas…en esto sí que da igual el lugar del mundo y la cultura.
Feliz fin de semana.
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